Navidad pulmonar

Recuerdos del psicólogo

El psicólog de la familia hace el famoso test de las manchas, también conocido como Test de Rorschach. Aquí están los resultados.



Alejandro: Veo papeles sin rellenar, trabajo que hacer, estrés laboral, estrés, estrés, trabajo, estrés. de hecho, me siento mejor ahora. Me ayudó a autodescubrime, mi meta es sólo trabajar. ¡Gracias doctor!
Psicólogo: No..., no hemos terminado aún...no, no se vaya, por favor, espere...Adiós.

Alicia: Veo un saxofón, una raqueta de tenis y satisfacción. Es lo que siempre quize hacer, pero ahora lo hace Virginia. Sé que pronto seré una gran estrella del saxofón y del tenis.
Psicólogo: ¿Ella o usted?
Alicia: Ella, es lo que dije, seré una gran saxofonista.
Psicólogo: ¿Ella o usted?
Alicia: Ella, me abrió los ojos doctor, seré una gran saxofonista cuando Virginia aprenda a tocar.
Psicólogo: ¿Ella o usted? Señora...no corra.... vuelva!!



Virginia: Veo...mmm....mmm....
Psicólogo: Ves...
Virginia: Aj, no me apure que mi glamuroso cerebro no debe ser apurado. ¡Aa! ya sé, veo a una chica de mi edad en una mansión de Beverly Hills gastando plata con su amiga Paris y luego comen un helado de 1000000 dólares. ¡Pero si está claro! Gracias doc, debo comprar más cosas, ¿cómo no me di cuenta? ¿Estaré pasando de moda? No creo. A comprar!!
Psicólogo: No...comprar tanto no es bueno...vuelve...por favor...no!!!



Guillermo: Veo una pelota de fútbol, es un partido, estoy en el estadio, la tiene, la patea, se lleva a uno, dos, tres, se prepara para tirar, ¡nooo! ¿qué haces? eres un #$#%$& recon$%&%$ quien #$%#%# ¿te enseñó a jugar? Mi hermano que no sabe jugar juega mejor que tú. Eso, claro, debo entrenar más y entrenar a mi hermano aunque no quiera. Gracias doctor, se pasó.
Psicólogo: Eee...no era a lo que quería llegar...no...por favor...tu tampoco...noo...regresa...¡para que sepas mi equipo es mejor que el tuyo!


Psicólogo: Bien Tomás, no tengas miedo, soy tu psicólogo, puedes contarme lo que quieras...
Tomás: ¿Lo que quiera? Bien, en la imagen veo a un psicólogo, que quería ser alguien en la vida pero no podía, ni pudo, no quería ser psicólogo, pero lo hizo para complacer a su familia, no tiene una familia propia, su futuro se arruinó cuando empezó a vivir, y ya no tiene esperanzas. ¿Sabe cómo termina esta historia?
Psicólogo: N..n..no. ¿cómo?
Tomás: El psicólogo murió un día como hoy...pero... ¿por qué corre?...¿ya terminamos?...se va a caer...auch...eso debió doler...vuelva pronto...y cuidado con los carros asesinos.

Moraleja: Los niños son diabólicos.

P.D: El psicólogo se volvió loco.

Capítulo 3: Comiendo con el enemigo

Los Pulmón Rex están almorazando en un restaurant, y como es de esperarse, las peleas empiezan ni bien acaban de entrar...

Alicia: Espero que esta vez comamos en paz, ¡por primera vez!, ¡no me hagan enojar!
Virginia: Woww! Ya era necesario venir a un restaurant de alta categoría. Si alguien malogra este momento lo ahorcaré con mis manos y lo enterraré en un jardín, pero obvio que será uno de clase.
Tomás: Hueca.
Guillermo: Déjala, no le hagas caso. ¿Dónde nos vamos a sentar?
Alejandro: ¿Qué tal si nos sentamos cerca a la ventana?
Tomás: ¿Otra vez?!!!!
Alicia: Es el único sitio disponible, siéntense y quédense tranquilos, de lo contrario los asesinaré.
Luego de unos minutos, llegó el mozo para atenderlos.
Mozo: ¿Puedo tomar su orden?
Guillermo(imitando a Virginia): Quiero "Le patita de guau-guau"
Virginia pateó a Guillermo bajó la mesa.
Alejandro(sonriendo malévolamente): Si siguen comportándose así, los dejo sin comer un mes.
Virginia: ¡Ajj! Él comenzó.
Mozo: Ejem
Tomás: Tomaré la especialidad del chef.
Alicia: Pobre de tí que no termines, ¡porque no verás la luz del día si es que no terminas de comer!
Guillermo: Yo quiero cualquier cosa. Escoja por mí.
Virginia: Yo pediré la "Croutone cicclete ag mendie"
Alejandro: Mmm... yo quiero...¡hay tanto para escoger! Pediré la primera opción y la segunda.
Alicia: ¿No es muy caro? Bueno, yo también pediré lo mismo.
Mozo: Sus pedidos estarán listos en 20 minutos.
20 minutos después...
Mozo: Sus pedidos.
Guillermo: ¿¡Esta cochinada vale tanto!?
Virginia: Esa cochinada fue elegida como la mejor comida en el restaurant más exlusivo y V.I.P de París. Ubícate, ¿ok?
Guillermo: ¡Recontra hueca! ¿Sabes dónde queda París?
Virginia: Mmm...sí. En Asia.
Guillermo: Sí!! Muy bien! ¿Cómo es posible que sigas viviendo?
Tomás: ¡Aaaaa! ¡Cállensee!!!!
Virginia: ¿Y a tí quién te invitó? ¡Ajj! Metiche.
Alejandro: Una sola palabra más y nos vamos.

Tomás(me vengaré de los dos, ya sé como): Hermana, ¿qué pasaría si tu plato se malogra?
Virginia: Explícate enano.
Tomás: Por ejemplo, si...no sé, un pedazo de carne aparece, o tu plato desaparece.
Virginia: Pero que asco. Ni siquiera lo pensaré. Enojarse es malo para la belleza.
Tomás(ya cayó): Guillermo, hermano. ¿Puedes pedirme otro tenedor? El mío se cayó.
Guillermo: Espera a que venga el mozo.
Tomás: ¡Noooo! Digo, sería mejor que lo pidieras en este momento.
Guillermo: Con tal de no estar cerca a la hueca, hago cualquier cosa.
Tomás(fase 1, lista): Querida hermana, podrías recoger el tenedor que se cayó. Leí en una revista que las flexiones son buenas para...la...piel.
Virginia: Excelente, mi piel será la envidia de Hollywood.
Tomás(hueca, fase 2, lista)
Tomás cogió el plato de Guillermo y echó la mitad en el plato de Virginia.
Cuado Guillermo volvió a su asiento, no notó nada extraño.
Tomás(fase 3, lista.Última fase en progreso): Hermano, te cuento un chiste a manera de agradecimiento.
Guillermo: Ladra.
Tomás: James Bond salva a un pollito, y el pollito le pregunta:¿Cómo se llama? James Bond contesta: Bond, James Bond. ¿Y tú chiquitín? Y el pollito contesta: Me llamo Llito, Po Llito.
Guillermo se puso rojo y no podía contener la risa. Cuando Virginia volvió a su asiento, notó que su plato tenía algo raro, pero su diminuto cerebro no entendía nada.
Virginia: ¿Qué le pasó a mi plato?
Tomás: Pregúntale a Guillermo, que se ríe tan sospechosamente.
Virginia: ¿Qué hiciste con mi plato?
Guillermo: Nada, ¿qué te pasa?
Virginia: Ya lo entendí. ¡Me tienes envidia!
Guillermo: ¡Eres una hueca total!
Virginia se levantó y cogió un vaso de agua que se encontraba cerca.
Guillermo: Suelta eso.
Virginia: Si tú lo dices.
Virginia echó el agua en la cabeza de Guillermo.
Alicia: ¡Hijo! Virginia, ¿qué hiciste?
Alejandro: Él se lo buscó, Virginia se defendió.
Alicia: ¿Ahora la defiendes?
Alejandro: Él arruinó su plato.
Mientras todos se despedazaban, Tomás pensaba que su plan fue un éxito, pero ahora tenía que callarlos.
Tomás: ¡Padre, se llevan tu auto en el que está el libro favorito de mi madre, la cartera favorita de mi hermana y el balón favorito de mi hermano!
Todos: ¡AAAA!
Mozo: Se fueron sin pagar. ¡Atrápenlos!
Todos: ¡Corran!

Moraleja: Si tu familia no se calla, no digas que el carro está en peligro.

Capítulo 2: Las compras infernales

La familia se dirige a un centro comercial para comprar ropa a sus integrantes. Parece ser una actividad que unirá a la familia, pero es todo lo contrario.


Llegaron al primer piso. Alejandro pregunta quien quiere ser el primero en comprar.

Virginia:Soy la mayor y la de mejores gustos. Osea, debo ser yo, ¿manyan?


Guillermo: Claro, vas a ser tú por ser la más hueca. Mamá, tengo que ser el primero porque en media hora empieza mi partido


Alicia iba a decir que Guillermo iba a ser el primero cuando Alejandro dijo:

¿Vas a ir a jugar? ¿A qué hora vas a volver? ¿Te das cuenta de los peligros que corres? ¿Dónde vas a almorzar?

Guillermo:En la casa de mi enamorada.

Alejandro:¿Tienes enamorada? ¿Cómo se llama? ¿Dónde vive? ¿Tiene teléfono?

Guillermo:Te dije todo esto ayer. Mejor compró primero.


Tomás (enojado):Mamá, la última vez que él fue primero nadie mas compró porque se demoró 4 horas.


Alicia:No creo que se demore. Su almuerzo con su enamorada es más importante que su familia para él.


Tomás:Que dramática eres.

Guillermo:¿Quieres callarte? Creo que encontré unas zapatillas que me gustan. Son las de allá.

Virginia: !Ajj¡, esas?. Osea, !Que aj¡ ¿Por qué no te gustan esas de allá? Son de la nueva colección de Armani.

30 minutos después, y luego de haber buscado en todo el centro comercial, Guillermo encontró las zapatillas, que eran las primeras que había visto. Alejandro las compró, y Guillermo se fue corriendo.


Tomás:¿Ahora a quien le toca?

Virginia:Creo que a tu hermana. Oseaa, ¡yo!

La familia se fue al piso de Virginia, que no era otro que el de los diseñadores de renombre.

Virginia:Quiero una falda y un par de tacos, pero obvio que serán caros.

Alicia(horrorizada):No prefieres más cosas que cuesten menos.

Virginia: ¡No! Que asco. Creo que ya ví la falda que compraré.

Luego de 5 segundos, trajo una falda negra.

Alejandro:¿No es muy alta?

Virginia: ¡Papá!, ¿esto es alto?, actualizate,¿ok? Esta falda obvio que va, pero que tacos?

Tomás: Querida hermana, leí en Internet, que los tacos de esta temporada han sido criticados y abucheados. ¿Vas a comprar algo que no está a la moda?

Virginia:¿Quée? ¿Criticados?¿No están a la moda?¡ Nooo! Paguemos esta falda y huyamos de este piso.

Alicia:Tomás, ¿por qué le dijiste eso a tu hermana?


Tomás:Si ella se compra esos tacos, tú y yo nos quedamos sin ropa. ¿Quieres que le diga que no es cierto?

Alicia:Por eso te quiero. ¡Hijo de mis entrañas!

Virginia volvió con su falda en una bolsa, y se dirigió a su padre.

Virginia:He visto un terno que de hecho te va a quedar. Siendo tu mi padre, no puedes dejar de estar a la moda. Al 4to piso.

En el cuarto piso, Alejandro se probó un terno, que era como todos los que tenía, negro.

Alicia:¿No prefieres este crema? ¿O este azul?

Alejandro:Mmm, no.

Tomás (mostrándole a Alejandro una corbata como todas las que él tenía): Padre, encontré una corbata que creo que te gustará.


Alejandro:Esta quedará bien con mi terno, por esto serás el siguiente en comprar.

Tomás:¡Bien!

Luego de comprar el terno, se fueron al piso donde ya se encontraba Tomás. Al llegar, su padre le dijo:¡Nunca vuelvas a hacer eso! ¡Si te caías de las escaleras! ¡Si te engachabas en una de ellas! ¡Tus pasadores están desatados, pudiste haberte matado!

Tomás: Temo que tu teoría está equivocada valiéndome de mi peso y estatura.


Alejandro: No intentes de pasarte de listo. ¿Qué quieres comprar?

Tomás: Encontré un polo al final del pasillo.

Alejandro: ¿No te hará frío? Mira que ya se acerca el invierno, y si te enfermas...

Tomás: Aaa, ¿ya? Mira, mejor me compro cuando vengamos en otra oportunidad.

Alicia: Pero cómprate, después ya no lo encontrarás, y tú me dijiste que querías comprar un polo.

Tomás: ¡No es cierto!

Alicia: Está bien, si no quieres no puedo hacer nada. ¿Por qué arruinas esta hermosa salida familiar? (Snif, snif)

Virginia: ¡Aj! Dejen de pelearse que la gente nos está mirando.

Tomás: Metiche.

Alejandro: Si no quieres comprar, no te rogaré. Alicia, ¿qué quieres comprar?

Alicia: Una cartera que ví en la entrada.

Alejandro: ¿No estabas triste?

Alicia: Este...sí. (Snif,snif)

Fueron al piso donde estaba la cartera que Alicia compraría, cuando ella vio que quedaba una última cartera, que estaba siendo comprada por una señora.

Alicia: ¡Es la última cartera! ¡Oh no!

Virginia: Mami, tienes que tranquilizarte, ¿ok? Eso nos pasa por no comprar por separado. comprar con tu familia es tan anti-fashion. ¡Ajj!

Alejandro: ¿Todavía quieres comprar algo?

Alicia: Si no compro esa cartera, alguien morirá cuando lleguemos.

Alejandro, Virginia y Tomás: No nos comas!!

Alicia: Síganme la corriente. Tengo una idea.

Alicia(a la señora que compraba la cartera): Señora, ¿qué tal?

Señora: Aaa...muy bien. ¿Nos conocemos?

Alicia: ¿No fue a mi oficina?

Señora: No lo creo. Me llamo Alicia. ¿Usted?

Alicia: Yo también.

Señora: ¿Puedo ayudarla?

Alicia: Rápido, agáchese.

Señora: ¿Por qué?

Alicia: Se le cayó su billete.

Señora: ¿Dónde?

Alicia: Abajo, a la derecha, exacto, siga en la misma dirección, no se detenga.

Alicia cogió la cartera.

Alicia: ¡Corran! A la caja!!!

Todos: AAAAAa

Señora: Esa es la cartera que iba a comprar.

Alicia: Ilusa!

Virginia:¡En tu cara!

Terminaron de pagar. Se fueron en un taxi. Como estaban cansados luego de haber corrido, se durmieron. Cuando el taxista les avisó que ya habían llegado, todos salieron como pudieron.

Tomás: ¿Quién tiene las bolsas?

Alejandro: ¿No tienes las bolsas?

Tomás: No, creí que las tenía Virginia.

Alicia: ¿Las tienes tú?

Virginia: ¿Yo?...¿Osea, yo cargar bolsas? Noo

Alicia: ¿Entonces quién las tiene?

Tomás: ¡Se quedaron en el taxi!

Alejandro: ¡Oh no! ¿Qué hacemos?

Virginia: ¡Mi falda Channel! ¡Corran! ¡Atrapen al taxi!

Taxista: ¡Una banda de delincuentes! Mejor me voy antes de que me ataquen.

Raaaaan.

Moraleja: Cuando vayas en taxi, carga tus bolsas.

Capítulo 1: Presentación de los personajes

En este capítulo presentaremos a los personajes de la familia Pulmón.

1. El padre: El señor Alejandro Pulmón es el patriarca de esta familia. Es sobreprotector en extremo, pero a veces no se interesa por la vida de sus hijos y esposa.
2. La madre: Alicia Rex es la esposa del señor Alejandro. Está obsesionada con la vida de sus hijos, llegando al punto de sofocarlos. A veces se encuentra en estados de felicidad, o con ganas de matar al primero que encuentre.
3. La hija mayor: Virginia es el primer ¿fruto? de este matrimonio. Desea ser millonaria y a veces adopta posturas de los ricos, rebelándose a pasatiempos de su familia que no es millonaria sino "media". En el fondo es completamente distinta.
4. El hijo del medio: Guillermo es el protegido de su madre pero el olvidado por su padre. Ama el deporte y es completamente distinto a su hermana, con quien se peleará seguidamente debido a las ideas que ella tendrá.
5. El ultimo hijo: Tomás Pulmón Rex completa esta familia. Es impaciente y renegón, aunque a veces puede ser alguien totalmente apacible. Cuando su familia se divida (Alicia-Guillermo VS Alejandro-Virginia) él siempre será el neutral.

La familia

Este blog estará dedicado a las aventuras y vivencias de una familia poco común, en la que sus participantes se soportan poco o nada. Cualquier parecido a la realidad es pura coincidencia.

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